Paraplejia y tetraplejia por intervención quirúrgica

Son muchos los casos, más de lo que parece, los relacionados con paraplejias y tetraplejias a consecuencia de procedimientos o intervenciones quirúrgicas.

La paraplejia es la parálisis de la parte inferior del cuerpo de una persona en donde el paciente pierde la sensación y capacidad de mover las piernas y parte inferior de su cuerpo ya sea la zona dorsal, lumbar o sacra.

La tetraplejia o cuadriplejia es una parálisis que tiene como consecuencia la pérdida parcial o completa del uso de las cuatro extremidades y del torso. Esta situación presenta una mayor gravedad, puesto que el paciente deberá necesitar ayuda en la mayoría de facetas de su vida, dependiendo para ello de algún familiar o cuidador.

Una operación de hernia es un típico supuesto de este ejemplo, en donde el paciente a a consecuencia de la falta de cuidado de los médicos en la médula espinal, termina padeciendo una paraplejia o tetraplejia.

El personal facultativo, tanto en la intervención propiamente dicha como durante el postoperatorio, debe de actuar cumpliendo todos los protocolos a la perfección para evitar que surjan complicaciones. La negligencia no siempre parte del médico cirujano encargado de ejecutar la operación, sino que puede venir también del resto de personal que interviene en la misma, como los anestesistas, enfermeros, etc.

En ningún caso deben de permitirse los fallos en una intervención, y de producirse es importante ponerse en manos de abogados expertos en negligencias médicas que ayuden a denunciar la situación.

Otro de los casos de paraplejias y tetraplejias muy comunes en operaciones quirúrgicas es el que se da en el área de la ginecología y obstetricia, durante el embarazo o el parto, en donde el feto puede llegar a sufrir ciertas lesiones que afecten a su médula espinal, limitando de este modo su movilidad tras nacer.

Operación de hernia, ginecología, obstetricia son ejemplos de negligencias médicas muy comprometedoras, puesto que no solo limitan en gran manera la actividad diaria del afectado sino que además provoca un importante daño moral tanto para el paciente como para el entorno cercano.

Si cree haber sufrido este tipo de situación por una mala praxis médica no olvide demandar la situación y solicitar una indemnización. El estudio de la situación se realiza de manera individualizada por lo que la cuantía a recibir dependerá de cada caso. Lo que se pretende es que cada paciente reciba una indemnización individualizada en función de sus circunstancias.

Además de informar al centro sanitario de lo sucedido mediante una reclamación es importante contactar con un abogado especializado en la materia lo antes posible para valorar el caso no perdiendo el derecho a la indemnización puesto que existen ciertos plazos para reclamar dependiendo se trate de un hospital privado u hospital público.

Muy importante guardar todos los documentos, informes que le hayan ido dando a lo largo del proceso, como radiografías, resultados de pruebas médicas, partes de incapacidad, recetas de medicamentos, etc., ya que serán de vital importancia durante el proceso judicial.

Si desea que empecemos a valorar su caso o que le resolvamos alguna duda, contacte con nuestro despacho de abogados vía teléfono o Internet y le responderemos lo antes posible. Damos servicio en Valencia, Alicante, Castellón y municipios próximos.

En el momento que tengamos todos los datos del interesado y hayamos estudiado la documentación aportada, valoraremos la estrategia a seguir ante los Tribunales con el objetivo de obtener los mejores resultados para nuestro cliente.

Nuestros años de trabajo y experiencia en la materia hace que llevemos un gran porcentaje de casos ganados, por lo que puede tener la tranquilidad de estar en buenas manos. Ante la más mínima duda contacte con nuestro despacho de abogados expertos en negligencias médicas, en donde le informaremos sin compromiso alguno.